Bogotá, 14 de marzo de 2022.

No ponemos en duda los esfuerzos que se han realizado por la educación en el país, sin embargo las acciones tomadas desde la pandemia han establecido una modalidad entre la semipermanencia y la presencialidad, que afecta el sistema de aprendizaje en los estudiantes, esto sumado al temor de los padres por el contagio que sus hijos puedan adquirir en las aulas, llevó a que muchos de ellos salieran definitivamente.

Otra característica que aún no deja claro la calidad del aprendizaje en la educación, es la virtualidad, un grupo de docentes hablan y no se sabe quién puede estar atento y quién no, de igual forma cómo va el nivel de comprensión de los temas vistos.

En este sentido, el ministerio de Educación ha sido enfático en que el retorno a clases presenciales es fundamental y que este permitió en el segundo semestre de 2021 que el 98% de los establecimientos educativos prestaran su servicio a 8,3 millones de estudiantes en Colombia.

¿Qué postura tiene la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode) frente al regreso a la presencialidad?

Fecode por su parte ha solicitado al Gobierno Nacional que se pare el retorno a la presencialidad, puesto que consideran que aún no hay condiciones seguras y las adecuaciones en los colegios no son suficientes para proteger a profesores y alumnos de nuevos contagios en las instituciones.

Como respuesta la cartera de educación aclaró que no desconoce el retorno con bioseguridad para avanzar en el aprendizaje y desarrollo integral de los niños, niñas y jóvenes.

Para lograr este objetivo el  Gobierno ha invertido más de $1,2 billones, los cuales junto a los recursos propios de las entidades territoriales han permitido mejorar los espacios físicos como entornos seguros y contar con los elementos de protección personal de toda la comunidad educativa.

¿Qué dicen los docentes sobre estos cambios y su efecto en la calidad educativa?

“Todo lo que se vivió en pandemia si afectó mucho la parte educativa, yo diría que la calidad en una forma indirecta, porque los estudiantes primero no todos tienen computador y hay algunas materias que necesitan no un computador básico sino más especializado, también está el problema de la falta de conectividad, no todos tienen acceso al mismo, por ejemplo para una video llamada, para compartir pantalla y por este tema se fueron muchos para sus sitios de origen, entonces estuvieron en veredas, en pueblos y muchas veces teníamos el inconveniente de los cortes de luz, de que se iba la señal de internet, de las ausencias, entonces todo eso influyó , esa intermitencia estudiantil. Digamos que por eso se tomo la decisión de grabar las clases para que ellos pudieran ver en diferido pero pues no es lo mismo porque el estudiante no interactúa directamente con el docente, no hay ese trabajo colaborativo entre ellos donde se genera conocimiento en el interactuar, entonces eso si afectó bastante la educación”, afirmó José Aguilar, docente de sistemas de varias universidades en Bucaramanga, Santander.

Garantizar el nivel de aprendizaje desde la distancia no es igual a que el docente pueda observar directamente el proceso del estudiante y asegurar una retroalimentación, resolver dudas y motivar la investigación.

¿Qué viene para la educación en 2022?

En la presente vigencia volverá la presencialidad y sin restricción de aforos en los establecimientos educativos, de acuerdo a los estipulado en la Resolución 2157 de 2021 emitida por el Ministerio de Salud y Protección Social.

Además del avance del Plan Nacional de Vacunación, la evidencia científica ha demostrado según experiencias en otros países que el retorno es viable y necesario.

Ante esta medida del retorno a la presencialidad, el ministerio de Educación aseguró que “frente a las posibles sedes educativas que se encuentren en proceso de habilitación de condiciones de bioseguridad, las cuales están identificadas por cada Secretaría de Educación y tienen un plan de acción específico en ejecución, es necesario aplicar las medidas administrativas correspondientes en cada caso, y con ello garantizar el derecho a la educación”.

Los retos que enfrenta la educación en Colombia son inmensos, la pandemia reflejó las grandes falencias que aún persisten en el sistema educativo, las brechas que se marcan y no permiten  garantizar una educación de calidad, es un camino largo por recorrer en todo el territorio nacional, el cual además de estrategias requiere con urgencia priorizar y destinar los recursos, para que lleguen a las zonas más alejadas del país, donde ir a una aula de clase es una odisea y requiere esfuerzos físicos, económicos e incluso de riesgo a la dignidad humana.