Luego de presentar el informe de la suspensión de contratos de exploración en el Foro Económico Mundial, la Ministra de Minas, Irene Vélez, ha sido polémica por presentar dicho documento sin estar soportado por sus mismos autores.

Su anuncio sobre la suspensión de contratos de exploración de hidrocarburos, nuevamente, generó una lluvia de críticas, colocando sobre la mesa el debate sobre la transición energética, principalmente por que se le reclama al Gobierno que aún no hay acciones ni estrategias claras para este cambio.

En el documento se asegura que junto con la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) se revisaron todos los contratos existentes de explotación y exploración. Detalló que Colombia cuenta con 381 acuerdos vigentes, de los cuales 118 están en etapa de exploración, 35 están suspendidos y de estos últimos, 32 tienen oportunidad de explorarse.

Además de esto, con una infografía detalla que Colombia tiene una autosuficiencia energética garantizada hasta 2042. Esto se lograría gracias a las reservas de gas natural. De hecho, Irene Vélez estima que en el peor de los casos sería hasta el 2037, no obstante, habría que contemplar los recursos excedentes.

Frente a ésta situación, son varios los congresistas que han pedido la renuncia a la funcionaria, debido a las irregularidades presentadas, entre ellas, se asegura que el informe carece de un sustento técnico, en el que se dice que Colombia tendría reservas de gas hasta el año 2037.

Sin embargo, En una rueda de prensa realizada en la mañana del 25 de enero, la ministra de Minas y Energía, Iréne Vélez, le salió al paso a las críticas por el informe con supuestas cifras falsas en el que se garantiza que existen las reservas de gas necesarias en Colombia para que el país sea autosuficiente hasta 2042.

Añadió también que “hay una insinuación incorrecta” y aseguró que el informe no tiene cifras falsas. En este punto, explicó “no es un informe de reservas”, sino un “balance de recursos y reservas” y que el informe de reservas es responsabilidad de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, no del Ministerio de Minas y Energía.

Además, argumentó que la diferencia entre “recursos” y “reservas” es que los primeros son “los elementos bajo el subsuelo que encontramos y que los proyectos nos permiten a través de los procesos de exploración declarar”. Agregó que para que los recursos pasen a ser reservas se requiere de “un proceso de política pública”.

“El documento que publicamos tiene la función de asegurar que conocemos cuáles son los recursos y que conociéndolos (…) los podemos pasar a reservas a través de política pública”. Además, aseveró que “las cifras que tenemos ahí, están avaladas en las cifras que tiene la Agencia Nacional de Hidrocarburos, en la información que las empresas han entregado públicamente (…), entonces no le estamos mintiendo a nadie”.

Así mismo, también dijo la jefa de ésta cartera que el documento pretende unificar las cifras sobre los contratos petroleros que están vigentes y que busca diferenciar los recursos prospectivos de los contingentes y las reservas. “No se están combinando datos, no se está mintiendo en las cifras”.