El coordinador de la respuesta al covid-19 de la Casa Blanca, Jeff Zients, comunicó que a principios de noviembre todos los extranjeros que vuelen al territorio norteamericano, deberán presentar además de la Visa correspondiente, una prueba de que están completamente vacunados y una prueba negativa de covid-19 tomada hasta 72 horas antes del viaje; los estadounidenses no vacunados serán sometidos a controles más rigorosos y tendrán que presentar una prueba negativa  no mayor a 24 horas de haber sido tomada y luego realizarse otra al llegar a su destino.

Los pasajeros que cuenten con el esquema completo de vacunación, no serán sometidos a cuarentena a su llegada a EE.UU.

Las vacunas admitidas son las que aplican en la nueva guía de viajes internacionales según los CDC, para su uso en EE.UU. y para uso de emergencia según la Organización Mundial de la Salud, las cuales son: Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson. En este sentido los CDC tienen previsto emitir una orden de rastreo de contactos, que obligue a las aerolíneas a recopilar información de los viajeros con destino a EE.UU. durante 30 días, con el objeto de alertar ante una posible exposición al virus.

El uso de la mascarilla será obligatorio durante los vuelos y habrá una multa de entre US$500 y US $1.000 por incumplir estas medidas por primera vez y entre US$1.000 y US$3.000 por reincidir, aseguró el presidente Joe Biden.